EL PAYASO PACHI POCHY

"El único payaso que hacé reír y llorar"
Gracias a la implementación de la Carrera Administrativa en el Municipio de Magangué en el año de 1994, y siendo Alcalde el Dr.Jorge Carcamo Alvarez, tuve la oportunidad de laborar en esa entidad pública.
Junto a varios amigos que ya conocía,  y otros con los cuales establecí entrañables lazos de amistad.
En la Secretaría Administrativa, dependencia a la cual fui asignado y cuya dirección  estaba a cargo del Dr. Nilcio Menco Garcia, me topé con la gallada de Roberto Tovio Caro, QEPD, Pedro Ribón Rojas -Veterano de Vietnam - y el recién ingresado en ése momento, Martín Marsiglia Salcedo.
Tres godos de raca mandaca, por que el jefe de dependencia era cuota de Don Pedro Gutiérrez, compartiendo oficina con Martín y yo, que éramos cuota del alcalde de turno de filiación Liberal. Ya se pueden imaginar ustedes la bathaola ideologica que reinaba en "El Palomar", mote atribuido al reducido espacio que habitabanos, por estar ubicado en la parte superior del vetusto Palacio Municipal de Magangué.
Desde bien temprano se armaba el zafarrancho entre el viejo Ribón y Pachi Pochy, como popularmente era conocido Marto, quienes discutían por todo.  Desde ponerse de acuerdo para preparar el café  en una cromada greca que reposaba a un lado del escritorio de Roberto. Hasta la distribución de sus oficios como auxiliares de servicios generales,  además de sus interminables perolatas enfrascadas en temas de carácter político.
Esa fue la retahíla por mucho tiempo, hasta que Pachi Pochy encontró accidentalmente en la bodega del almacén de la alcaldía que estaba a cargo de Tovio, un viejo disfraz de payaso color rojo y azul elaborado en satín, y que venía acompañado de unos zapatones. Junto a una cachucha abullonada, similar a la usada por Super Mario Bross.
Ante tal hallazgo afloró en su cacúmen, reforzado en su adolescencia por las famosas pastillas Geniol que le recetaba el finado Dr. Pedro J Valdelamar, su médico de cabecera, la idea de montar un rebusque de recreación y animación infantil
El escollo, fue convencer a Roberto, que craneara la forma de sacar del inventario el disfraz. Un par de empanadas con picante que vendía un muchacho que llegaba pasada las tres de la tarde y un vasado de horchata de las de Rigo QEPD, fueron suficientes para que el atuendo se esfumara, hasta del Kardex que yo manejaba.
El resto fue obra de carpintería, puesto que Marsiglia no necesitó de mucho para inventar el repertorio a utilizar en los eventos infantiles. Su peculiar rostro, aunado a muecas innatas en él, y el tarareo de la famosa canción ranchera de "Ay Chabela" constituyeron el repertorio para montar el show
Armado el plante, pulularon las contrataciones y Pachi Pochy dejó de ser un simple auxiliar de la Secretaria Administrativa, para convertirse en icono de las actividades lúdicas y recreativas del ente municipal. Por tal motivo, consiguió más flexibilidad en su horario laboral, logrado librarse así de la camorra de pelo e' burra, como también era conocido el benemérito Pedro Ribón
Han pasado ya 28 largos años de la aparición del payaso Pachi Pochy y éste aún se mantiene vigente. Impartiendo alegría y llanto - por sus morisquetas- a su infantil audiencia.